Seguro que a todos nos ha pasado…. A medida que los peques crecen hay juguetes que ya no usan y quedan relegados a una esquina o al fondo de un armario. Al final la casa se llena de juguetes, y tirarlos no es una opción, ¿verdad?
Ya hemos hablado de la importancia del reciclaje, la concienciación ambiental y de inculcar valores positivos a nuestros hijos e hijas desde que son pequeños. Pues aquí tenemos una nueva oportunidad.
Primero de todo, hay que hacer limpieza. Habrá juguetes que por el uso se han deteriorado y están inservibles. No se trata de donar basura, sino de limpiar y preparar los viejos juguetes para una segunda vida con otro niño.
Estoy segura de que tienes en casa un montón de juguetes que están perfectos o que solo necesitan una pequeña puesta a punto, ¿a que sí?
Esta es una tarea que debemos hacer con los más pequeños, que entiendan qué estamos haciendo y por qué es importante.
Nunca debemos donar los juguetes a escondidas, por miedo a la reacción de nuestros hijos, porque sentirán que les están quitando algo suyo sin ningún motivo. Tenemos que hacerles partícipes.
Un off-topic. Cuando hagas esta revisión fíjate en qué marcas fabrican juguetes de calidad y cuáles no, de por qué los juguetes de plástico (especialmente de mala calidad) tienen una vida más corta que los de madera, etc. En definitiva, de muchas de las cosas de las que hemos hablado antes en el blog de Que de juguetes.
Una vez hemos decidido qué juguetes merece la pena conservar, llegan otras preguntas:
– ¿A quién puedo dar los juguetes usados?
– ¿Dónde puedo donar los juguetes de segunda mano de mis hijos?
– ¿Habrá algún sitio de recogida de juguetes cerca?
– ¿Podría venderlos?
Prepárate porque te voy contar distintas opciones a las que yo suelo recurrir.
Donar juguetes usados
Antes de avanzar quiero insistir una vez más en la idea más importante: debemos donar los juguetes en buen estado, y no pensar que al niño que le vaya a llegar ese juguete se debe conformar con lo que le den, estando roto o en mal estado.
Seguro que te has dado cuenta de que llega un momento que los pequeños ya no se entretienen con un determinado juguete y, antes de abandonarlo definitivamente, pasan a una fase de destrucción. Lo lanzan, lo chutan o lo estrellan contra lo primero que ven.
Esto es algo muy frecuente, y está relacionado con la pérdida de atractivo del juguete, bien porque se vuelve repetitivo o bien porque el niño ha crecido y ya no es acorde a su edad. En definitiva, el juguete ha perdido el interés.
Este es el momento de hablar con el pequeño, hacerle entender que ese juguete ya no le interesa y antes de que se estropee, podemos regalárselo a otro niño o niña. Es como una misión de Toy Story: encontrarle un nuevo hogar.
¿Y por dónde empezamos?
Seguro que en alguna ocasión has regalado algún juguete que tus hijos ya no utilizaban a un amigo o familiar con hijos más pequeños… o que tal vez va a ser mamá o papá por primera vez.
Esta suele ser la primera alternativa que nos viene a la cabeza a la hora de dar una segunda vida a los juguetes usados, ¿verdad? Y es una muy buena opción, ¡pero hay otras!
Yo por ejemplo suelo donarlo al colegio de mis hijos, me aseguro que sean juguetes que valgan la pena y que puedan ser usados por varios niños para poder dejarlos en el aula. En mi caso siempre me lo han agradecido, pero antes de hacerlo te recomiendo que preguntes en el colegio si les puede interesar.
Otro de los sitios donde también he donado juguetes ha sido en la Cruz Roja, especialmente en Navidades, ya que suelen lanzar campañas de recogidas de juguetes. Pero también durante el resto del año en muchos puntos de la Cruz Roja los recogen. Además de las campañas navideñas, llevan tiempo con la campaña Sus Derechos en Juego, a través de la cuál recogen juguetes para niños desfavorecidos como una forma de preservar su infancia.
Las asociaciones vecinales o los ayuntamientos también suelen recoger juguetes, si tienes alguna en tu barrio o pueblo pregunta, y si no lo hacen también puedes hacerles una propuesta.
Si lo que quieres es donar una consola existe la iniciativa Juegaterapia, que es la recogida de videojuegos o consolas para que los niños hospitalizados puedan jugar. Esta iniciativa es muy conocida y tiene como padrinos a muchos famosos. Puedes informarte en tu hospital o meterte directamente en su página web, y ahí tienes toda la información.
Existe también una APP que se llama BeneBene que te pone en contacto con las asociaciones. Tú subes los artículos que quieras donar y si a alguna asociación le interesa se pone en contacto contigo mediante la APP. Está genial, ¿verdad?
Si eres un fan incondicional de la economía circular, siempre puedes plantearte vender los juguetes en alguna plataforma de segunda mano. Hay montones… lo importante es que los juguetes que están hoy bien, no acaben rotos y abandonados sin más futuro que un contenedor de basura.
¿Y si vamos más allá y regalamos juguetes nuevos?
Esto es algo que he practicado en varias ocasiones, y que en Que de Juguetes hacemos todos los años en Navidad.
Si nuestra economía nos lo permite, podemos escoger un momento propicio y comprar algún juguete específicamente para ser donado. Es una actividad con la que los más pequeños se involucran y que les encanta.
Además les ayuda a entender la importancia de la solidaridad y que no todas las personas tienen los mismos recursos. Incluso ese momento de elegir un juguete nuevo, precioso, y saber que no va a ser para ellos, es un aprendizaje positivo.
En definitiva, donar juguetes en repartir alegría, es aprender valores, es cuidar nuestro planeta y es, simplemente, una acción de esas que alimenta el alma. Así es que, ya lo sabes, rescata esos juguetes infrautilizados antes de que se deterioren, y búscales, con tu hijo o hija, un nuevo hogar.