Aunque actualmente es el modelo básico de su gama (solo por delante del “Ultra”), lo cierto es que se trata de un aerógrafo muy versátil, de gama media y con una excelente relación calidad/precio.
A pesar de que la variedad de versiones ofrecidas en la línea “Evolution” ha crecido notablemente (buena prueba de su éxito), nos vamos a centrar aquí en el Evolution clásico. Un aerógrafo de doble acción, alimentación por gravedad y fabricado en acero niquelado. Su peso de 80 gramos y un sistema de gatillo suave y sin atasques hace que el manejo sea realmente sencillo. Un cuidado diseño y buenos acabados lo convierte en una bonita herramienta.
El Evolution se presenta en un estuche rígido de un característico color amarillo y se comercializa en dos formatos, el denominado Evolution Solo y el Evolution Two in One. La única diferencia entre ambos es que el Solo está equipado con boquilla de 0,2 mm y depósito de 2 ml, mientras que el Two in One incluye además un juego extra de obturador y aguja de 0,4 mm, así como depósitos de 2 y 5 ml. El Evolution X, ofrecido también en versión Solo y Two in One, es el mismo modelo de aerógrafo pero con sistema de alimentación de pintura mediante succión. En el estuche se incluye también un conector rápido macho y un pequeño libreto con recomendaciones de usos y despieces.
Como otros aerógrafos de Harder & Steenbeck, las juntas del Evolution están fabricadas en teflón (PTFE), siendo especialmente resistentes a los solventes químicos presentes en algunos tipos de pintura. Todas las juntas son accesibles para permitir su limpieza y sustitución.
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Otro de los puntos fuertes de este modelo es la facilidad de su desmontaje, lo que favorece los trabajos de limpieza. Para ello, el obturador flotante y la posibilidad de desmontar el depósito de pintura son una gran ventaja. Desmontarlo por completo y volverlo a montar lleva tan sólo unos pocos minutos.
Como no puede ser de otro modo en marcas de primer nivel, la posibilidad de conseguir todo tipo de repuestos y accesorios es sencilla, aunque su precio suele ser alto. La aguja y el obturador son las partes más delicadas, especialmente este último, que tiene cierta tendencia a sufrir fisuras en su extremo (ojo con apretar en exceso la aguja contra él). Como accesorios extra se pueden adquirir sets de boquillas de cuatro pasos distintos: 0,15; 0,4 y 0,6 mm, además del de 0,2 mm considerado “estándar” en esta gama.
Como parte negativa, carece de regulador para bloqueo de la aguja, muy útil a la hora de conseguir una aplicación de pintura uniforme y constante (sí está disponible en la gama Evolution Silverline). En determinadas ocasiones también se puede echar en falta una tapa para el depósito (se ofrece como accesorio por separado) y un depósito de mayor capacidad.
La entrada de aire se realiza por la parte inferior mediante rosca de 1/8 de pulgada, como en la mayor parte de aerógrafos. La presión de trabajo recomendada por el fabricante es de 1,5 a 3,0 bares. Presiones por encima de 4 bares no son recomendables en este modelo.
En general, un excelente aerógrafo para aficionados que quieran iniciarse o mejorar las prestaciones de un aerógrafo básico y también indicado para aficionados más experimentados que no quieran realizar un gran desembolso pero busquen una herramienta solvente.