La gama “Märklin My World” está formada por un pequeño mundo (de ahí su nombre) de trenes, edificios y accesorios diseñados para que niños y niñas de más de 3 años puedan JUGAR, con mayúsculas. Un mundo que crece año tras año.
Al fabricante alemán Märklin (pionero y líder mundial en modelismo ferroviario) propone atractivas cajas de iniciación “My World”, sin duda el principal reclamo de la gama. Presentadas en un cuidado y atractivo estuche de cartón encontramos un tren, un completo circuito de vías y un mando (algunas incluyen accesorios adicionales). Cada caja recrea un tren basado en modelos reales, aunque notablemente simplificados. Podemos encontrarnos un ICE de alta velocidad una locomotora de vapor BR24, una diésel americana de Santa Fe…. todos ellos fabricados en plástico de alta calidad y resistente, sin piezas que puedan desprenderse y con un sistema de enganche mediante imanes que facilita las “operaciones ferroviarias” de nuestros pequeños. El resultado es un producto manejable y robusto, a prueba de las posibles caídas y accidentes “domésticos”.
Además de todo lo anterior, y quizá lo más sorprendente, es que todos los trenes están dotados de diferentes sonidos e iluminación, incluso un sistema de generación de humo en el caso de las máquinas de vapor.
Aunque los primeros modelos funcionaban a pilas, los más modernos disponen de una batería interna recargable a través de la red doméstica o incluso un PC (emplea el mismo tipo de conector universal que los teléfonos móviles, tablets, etc.). El cable de carga está incluido en los sets. Su duración es perfecta para asegurar buenos ratos de entretenimiento sin interrupciones.
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El circuito propuesto en las cajas de iniciación puede ampliarse infinitamente, aumentando las posibilidades de juego y diversión. El tipo de vía es otro de los aciertos de Märklin “My World”, ya que sus trenes emplean vías a escala H0 (de 16 mm), por lo que son perfectos para los papis aficionados al modelismo ferroviario, porque permite a los peques circular sus trenes en la misma maqueta que ellos. Hay que señalar que Märklin ha diseñado una vía alternativa, con rail de plástico, que resulta mucho más económica que las que se emplean en las maquetas de “los papis”. También tenemos semáforos funcionales, pasos a nivel así como túneles y rampas para completar nuestro circuito.
El sistema de control de los trenes es un diseño tipo “joystick”, totalmente inalámbrico, que facilita a los pequeños ferroviarios un manejo sumamente sencillo de los trenes. La palanca principal tiene tres tramos de velocidad y un total de siete posiciones (tres para sentido y un punto central de parada). Un gatillo permite la detención rápida del tren y cuatro botones controlan las funciones de sonido y luz. El alcance del sistema es muy bueno, más que suficiente para cubrir toda una habitación de juegos. El mando funciona con dos pilas tipo AA (incluidas en los sets).
Cada mando y locomotora tienen un pequeño conmutador de dos posiciones que permite “sincronizarlos” de forma que pueden controlarse dos trenes de forma independiente. Basta con situarlo en la misma posición en la locomotora que en el mando.
Para aumentar aún más las posibilidades de juego y diversión, “My World” ofrece una gran cantidad de edificios y accesorios. Podemos encontrar en su catálogo una estación, un andén para los viajeros, grúas de carga, una granja con animales, e incluso un aeropuerto como novedad estrella del 2018. Y lo mejor es que siempre guardan alguna sorpresa en forma de funciones de luces, sonidos, botones de acción, etc.
Si los trenes infantiles han sido siempre uno de los juguetes preferidos por los niños, con “My World” de Märklin estarán encantados. Horas y horas de diversión aseguradas que hace de los trenes “My World” un regalo perfecto para niños y niñas de entre 3 y 6 años.
